Els vaig prometre el mar/ El mar serà...

El relato es la historia novelada de los dos últimos años de vida de un personaje real, el maestro Antoni Benaiges Nogués, quien, a partir de 1934, ejerció como docente en la escuela de Bañuelos de Bureba (Burgos). A su llegada, Benaiges tropieza enseguida con la desconfianza de la gente del pueblo, que no entiende que rechace los métodos tradicionales, que rehúse castigar a los niños, que prefiera que éstos creen sus propios textos para el aprendizaje de la lectura y de la escritura y, sobre todo, que haya retirado el crucifijo de la pared del aula, que no vaya a misa y considere que, puesto que la República define a España como un país laico, no tiene por qué enseñar religión a su alumnado. Esta desconfianza inicial desaparece en algunos
casos al ver el cariño y la dedicación que el maestro demuestra a su alumnado; en otros, por el contrario, se convierte en antagonismo y deseo de venganza, sentimientos que, exacerbados por la participación del maestro en la política de la cercana Briviesca, desembocarán en un final trágico para Benaiges y muchos otros al desatarse la violencia fascista en los primeros días de la Guerra.