Spanish Crossings

Una tarde de mayo de 1937 Lorna, una joven socialista británica, acude a una reunión de solidaridad con la guerra de España y con el Comité de Apoyo a los Niños Vascos encargado de organizar la acogida de estos en Inglaterra. Allí conoce a Harry, un miembro de las Brigadas Internacionales de paso por Londres y ambos entablan una brevísima pero profunda relación amorosa. Después de la marcha de Harry, que debe reincorporarse a su regimiento, Lorna recoge unos papeles de su amante entre los que se incluye un testimonio de primera mano del bombardero de Gernika. Posteriormente, como parte de su trabajo, la joven debe formar parte del Comité de Apoyo a los Niños Vascos e inspeccionar las instalaciones donde estos han sido acogidos. Allí conoce, entre otros, a Pepe, un niño de quince años al que Lorna apadrina y trata más de cerca. Según avanza la novela, asistimos a la evolución ideológica de Lorna, que, desde posiciones pacifistas, toma creciente conciencia de la hipocresía de la postura británica frente a la guerra de España y llega a sufrir la presión policial por su relación con Harry y con la causa de los niños vascos. Posteriormente, el relato se centra en la descripción de las vivencias de Lorna durante la guerra para finalmente retomar su relación con Pepe, en la que resulta ser la parte menos convincente de la historia. La novela es, en suma, una visión intimista del eco que tuvo la guerra española en Inglaterra.

(Resumen extraído de AMESDE. Repertorio bibliográfico 2019)