La ciutat de ningú

Esta breve novela consiste en un continuo monólogo interior, aparentemente caótico y disperso, que funciona como una especie de catarsis mediante la cual el protagonista, desubicado en el mundo en el que vive y en tratamiento psiquiátrico, va descubriéndonos sus miedos y sus frustraciones. Rememora la figura de su padre, un antiguo falangista mallorquín, amigo y compañero del conde Rossi. Se debate en desprenderse de unas fotos antiguas que delatan a su progenitor como cómplice y artífice de la represión franquista en la isla. Teme, por una parte, que estas fotos lo delaten y puedan exigírsele cuentas del pasado; pero, por otra, al deshacerse de ellas también se deshace de un pasado que añora, porque en él vivía mejor, ya que estaba hecho para gente como él. En su soledad, monologa con su gato y con el espectro del padre. Compara constantemente un presente que encuentra negativo en todo con un pasado en el que los vencedores imponían a la sociedad sus creencias y su modo de vida. Se trata de un libro muy bien escrito, de una estructura narrativa perfecta y de una prosa muy brillante y eficaz, en la que todo se insinúa y sugiere con gran sutileza. Un libro, en suma, que reclama su pronta traducción al castellano.

(Resumen extraído de AMESDE. Repertorio bibliográfico 2016)