El hijo del guarda (Una elegía de la Guerra Civil en Sierra de Gata)

El autor investiga la historia de su padre, conocido como el hijo del guarda (forestal), en la zona donde pasó su infancia y donde le sorprendió, con diecisiete años, el inicio de la Guerra Civil. Acababa de fundar las Juventudes Socialistas en Valverde del Fresno (Cáceres) y de participar en varios mítines de la campaña del Frente Popular. En abril del 36 sufrió un atentado,
del que su padre se quejó en una carta a Largo Caballero, acusando de él al comandante de la Guardia Civil. Al producirse el levantamiento, fue encarcelado varios meses en Coria. De improviso, se incorporó al frente con los nacionales y, al terminar la guerra, ingresó en el ejército del Aire, donde llegó a ser teniente coronel y profesor de vuelo en la Academia de San Javier. En 1978 participó en un mitin del partido socialista en Valverde del Fresno junto con Pablo Castellano. Murió en Badalona a los 90 años y fue enterrado en Oliva de la Frontera (Badajoz) junto a sus padres. Es entonces cuando su hijo inicia su investigación recorriendo la zona, buscando documentos y testigos de su encarcelamiento e incorporación al ejército.
La estructura de esta narración es atípica; el autor la llama «elegía», dividiéndola en: Introito, Memento y Epicedio. Alterna la segunda persona, con que el autor se dirige a sí mismo durante la investigación real (2014), expone sus dudas, sus descubrimientos, sus conversaciones con los distintos testigos que va localizando, con unos retazos de ficción que se formulan como monólogos, en primera persona y cursiva, en los que da voz a su padre preso, a su abuela, su abuelo y muchos personajes (guardias civiles, falangistas, etc.) que conocieron de primera mano o intervinieron en las vicisitudes por las que pasó su padre en 1936. Este relato coral, en dos épocas distintas, proporciona un fresco de lo que fue la represión dura e indiscriminada esos primeros días en la zona; pero, respecto a la historia del hijo del guarda, el puzle que se va armando sólo confirma lo que ya se imaginaba desde el comienzo: fue obligado a incorporarse al ejército franquista para no poner en peligro la vida de su padre. El lector se pierde un poco en las idas y venidas por los mismos parajes, y en las repeticiones de testimonios e interpretaciones desde distintos puntos de vista. Es un ejemplo de autoficción, tan de moda últimamente. A
medida que avanza la narración, va perdiendo fuerza, intriga y tensión narrativa. Queda reducida a una mera elegía. Incluye fotos familiares y copias de documentos.

(Resumen extraído de AMESDE. Repertorio bibliográfico 2015)